Bodegas Toro Albalá, referencia mundial en vinos generosos, conmemoró el pasado viernes su centenario con una celebración cuyo eje vertebrador fue una cata que recorrió sus cien años de historia a través de sus vinos más prestigiosos, los PX de añada.
La cata, celebrada en sus instalaciones, contó con profesionales del sector y personalidades como el delegado territorial de Agricultura, Ganadería y Pesca en Córdoba, Juan Ramón Pérez; el delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Córdoba, Antonio Repullo; Araceli Cabello, Directora General del Medio Natural, Biodiversidad y espacios Protegidos, dependiente de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía; la alcaldesa de Aguilar de la Frontera, Carmen Flores; la Alcaldesa de Moriles, Francisca Carmona; el alcalde de Montilla, Rafael Llamas; el presidente y el gerente del Consejo Regulador de Montilla – Moriles, Javier Martín; y Enrique Garrido, respectivamente.
El presidente de Bodegas Toro Albalá, Antonio Sánchez, aseguró que "la filosofía de Toro Albalá ha girado siempre en torno a un consumidor exigente. Yo he cumplido con mi obligación, haciendo el mejor vino posible y sabiendo dónde estamos, porque al final, es el cliente el que importa y ha sido siempre el centro de nuestro proyecto". Sánchez valoró la buena gestión de la bodega durante este siglo de trayectoria, apreciando la labor de su tío, el fundador, José María Toro Albalá, y esperanzado con el futuro de la bodega y las generaciones al frente, que habrán de poner atención, además de al buen funcionamiento de la bodega, a la viña, eje de la siguiente etapa de Toro Albalá como referente de calidad en Montilla- Moriles.
Sánchez definió que su trayectoria en la bodega se basa en "poner en práctica aquellos conocimientos que recibí y tratar de mejorarlos para encontrar un futuro viable en Montilla-Moriles". Esta viabilidad la encontró con el descubrimiento y recogida de vinos viejos que corrían el riesgo de desaparecer tras el cierre de pequeñas bodegas en la zona.
Para el propietario, "vivimos el mejor momento de la bodega y contamos con gente joven que está ilusionada por coger el relevo y seguir con nuestro legado, un libro abierto con muchas páginas por escribir". A la hora de definir la bodega, Sánchez aseguró que "Toro Albalá es hoy una bodega de primer nivel mundial con sus grandes amontillados, palo cortado, px dulces y vinagres". En cuanto al futuro, fue claro: "las nuevas generaciones deben asentar el trabajo que hicieron sus predecesores".
"Estamos muy orgullosos de haber llegado hasta aquí manteniendo el carácter familiar de Toro Albalá y respetando toda la labor que durante décadas ha realizado Antonio Sánchez, quien ha marcado un antes y un después en la enología de los vinos de Montilla – Moriles. Ahora encaramos el futuro con una vuelta a la tierra, practicando una viticultura respetuosa con el entorno y dando valor a los pagos históricos de Montilla, Sierra de Montilla y Moriles Altos. El futuro se presenta, para nosotros, casi tan emocionante como lo han sido estos primeros 100 años de historia", comentó el director general de Toro Albalá, Paco Muñoz.
El recorrido de la cata ha pasado por los mejores vinos de las distintas gamas de vinos con los que cuenta la bodega: MIUT EL JABONERO, MIUT SANTA MAGDALENA, MIUT L'ASSEMBLAGE, MARQUÉS DE POLEY AMONTILLADO SELECCIÓN 1951, MARQUÉS DE POLEY PALO CORTADO SELECCIÓN 1964, PALO CORTADO CENTENARIO, AMONTILLADO CENTENARIO, DON PX CENTENARIO y DON PX EXCELSO.
Para Toro Albalá, la vuelta al viñedo es una necesidad, proteger el patrimonio vitícola montillano y desarrollarlo es una labor que empieza a ser urgente para trabajar en nuevos perfiles que reflejen el terroir, sin perder de vista la esencia de la bodega, los tesoros que custodia en sus naves de albero.
Asimismo, la apuesta por los vinos añada y muy viejos es una filosofía que no solo ha conseguido vinos excepcionales, sino que también le ha valido a la bodega grandes reconocimientos nacionales e internacionales, haciendo que sus PX se encuentren en los mejores restaurantes del mundo.
Este primer centenario encamina a Toro Albalá por nuevas vías para interpretar Montilla-Moriles, con la vista de nuevo puesta en el territorio y los pagos históricos de la Denominación y la elaboración de vinos vinculados al terroir, tanto generosos y PX de añadas, como la nueva línea de vinos tranquilos que abandera MIUT, una trilogía de px de diferentes orígenes que se han llamado así en tributo al Mimo, la Identidad, la Uva y la Tierra de Montilla- Moriles.