La cuarta temporada de Misterios de Aguilar terminó este fin de semana con la visita al Auditorio de los Desamparados de nuestra localidad. Si estás leyendo este artículo y aún no has tenido oportunidad de ver el programa, tranquilo/la porque intentaremos no desvelarte muchos detalles.
La ocasión lo merecía y la noche fue espectacular. Como es habitual, nos adentramos en un nuevo lugar lleno de misterio y de sucesos extraños y paranormales. Provistos del equipamiento necesario para vivir una experiencia de aislamiento durante una noche completa, las respuestas a nuestra presencia en el Auditorio no se hicieron esperar.
En Desamparados descubrimos dos lugares muy señalados y bien identificados. El primero, el escenario, una ubicación donde desarrollamos buena parte de las investigaciones. El segundo, el pasillo de acceso a los camerinos. En esta localización fue quizá donde tuvimos el momento más intrigante e inverosímil de la noche.
Y sí. Una vez más volvimos a utilizar la Spirit Box (Caja de Espíritus), pero para conocer que sucedió debéis ver el programa.
Sin más, nos despedimos. Eso sí, antes nos gustaría trasladar nuestro agradecimiento a todas las personas que hacen posible ‘Misterios de Aguilar’, a los que nos ayudan desde fuera y al concejal de Cultura del Ayuntamiento de la localidad, Antonio Cosano, por permitirnos llevar a cabo esta investigación en el Auditorio de los Desamparados.
Esperamos traer novedades muy pronto.