Los institutos de enseñanza secundaria de Aguilar de la Frontera, el I.E.S Ipagro y el I.E.S Vicente Núñez, han abierto hoy sus puertas al inicio del curso 2021/22.
Ha sido una jornada de presentación, sobre todo para los más jóvenes que entran al primer curso de la E.S.O. En ambos institutos se les ha dado una bienvenida: en el I.E.S. Vicente Núñez ha sido a través de una charla en el salón de actos, donde también se han explicado las medidas de seguridad que sigue el centro para evitar los contagios por COVID- 19, y en el I.E.S Ipagro mediante una visita guiada por las instalaciones.
Ambos centros cuentan con la misma normativa de seguridad, cuya efectividad ya se comprobó durante el pasado año, según mencionan sus directores. Esto es debido a que no se tuvo constancia de ningún contagio producido dentro de las instalaciones escolares.
La oferta educativa de ambos centros continúa siendo la misma que en años anteriores. El instituto Ipagro ofrece desde primero a cuarto de la E.S.O., mientras que en el Vicente Núñez se puede cursar educación secundaria obligatoria, bachillerato en modalidad de ciencias y de sociales, tres ciclos formativos de grado medio (Sistemas Microinformáticos y Redes, Gestión Administrativa y Pastelería, Panadería y Confitería), dos líneas de formación profesional básica (Auxiliar de Gestión Administrativa y Auxiliar de Mantenimiento de vehículos) y la secundaria para adultos, que se imparte por las tardes en nivel 1 y 2.
En relación a la cantidad de alumnos con la que cuentan los centros este curso, el I.E.S. Vicente Núñez ha perdido una línea de primero, lo que supone un total de 30 alumnos menos. De este modo serían alrededor de 570, una cifra inexacta debido a que aún se encuentran abiertos los plazos de matriculación de sus ciclos formativos y la secundaria para adultos. En el caso del Instituto Ipagro, se calcula un alumnado de 310 jóvenes aproximadamente, cifra muy semejante a la del pasado año. En cuanto a la plantilla de docentes, el primero cuenta con 64 profesores y ha ganado tres refuerzos debido al COVID-19, uno más que el curso pasado. El caso del Ipagro es diferente, que ya no cuenta con los dos refuerzos que se le adjudicaron el año anterior para hacer frente a las medidas implantadas debido a la pandemia.
