La imagen de Nuestro Padre Jesús del Calvario lucirá unas nuevas potencias durante su estación de penitencia de la Semana Santa 2024. Dichas potencias están realizadas en metal bañado en oro fino y plata de ley en su color.
Su diseño ascendente nos lleva desde lo terrenal, empezando con las flores, todas realizadas a mano, forjadas y grabadas hasta lo divino. Están colocadas de manera orgánica y natural en cada una de las potencias, siendo todas distintas.
El protagonismo de estas potencias lo tiene el palio de respeto, usado por la Hermandad en la estación de penitencia para acoger al Señor de la VeraCruz. Esto detalles están forjados a mano y realizados bajo una complicada lampistería. Dichos palios acogen un águila, en alusión al pueblo de Aguilar; una Cruz (VeraCruz), en honor a la Hermandad y su barrio; un sombrero y un cayado de pastora, atavío usado por Nuestra Señora de los Remedios Coronada; y un costal, en representación de sus hijos costaleros.
Todos estos elementos se presentan sobre un gran óvalo con textura y rodeado de circonitas para centrar la atención, aunque este se ve partido por el palio. Presentan un diseño arquitectónico por sus penas y molduras que quedan en un tercer plano, que da robustez y aportan silueta al cuerpo principal. Después, tres coronas rematan este dosel.
En alusión a la tradición vinícola de la localidad, observamos grandes ramas de parra en forma ascendente y para rematar la obra unos contundentes rayos biselados y pulidos a espejo que aportan luz, brillo y Divinidad al Señor.
Estas potencias han sido realizadas en el taller del maestro Manuel Casiano Fernández, situado en el popular barrio de Triana (Sevilla) y donadas por el hermano costalero, Eduardo Montero Castro.
