En una comparecencia ante los medios de comunicación, Carmen Flores, alcaldesa de Aguilar de la Frontera ha hecho referencia a la polémica surgida a raíz del inminente derribo de la Cruz de las Descalzas.
Flores ha destacado que “para mí ha sido una sorpresa cuando este fin de semana conocí que salió a la luz un documento interno de este Ayuntamiento, una resolución de alcaldía, que se hubiera hecho pública cuando acabase ese expediente. Esto tiene un procedimiento y no debería de haberse filtrado, ya que es ilegal. Este hecho ha provocado que la persona que se nombra en dicho documento haya recibido incluso amenazas por haber aceptado un trabajo que se le ha encomendado”.
Ante esta situación, la regidora del Ayuntamiento de la localidad ha señalado que “intentaré enterarme de quién ha filtrado esa información, para conocer la calidad de ciertas personas. No sé qué objetivos tienen, pero sanos no son. Este Equipo de Gobierno tenía pensado actuar ordenadamente, ofrecer una comparecencia para explicar lo que se iba a hacer”.
Según ha explicado Carmen Flores, “desde que se constituyó el Consejo Sectorial de Memoria Histórica se han puesto sobre la mesa varios asuntos. Sin embargo, a pesar de los requerimientos que se le hicieron a los diferentes Equipos de Gobierno, nunca se llegó a actuar. Nosotros siempre intentamos ser responsables y consecuentes. Lo primero que hicimos fue quitar el yugo y las flechas que se encontraban en la Barriada del Carmen, próximamente se procederá a la retirada de honores y distinciones a Francisco Franco y, el otro proyecto, era la retirada de la Cruz de los Caídos”.
“En este camino, el Ayuntamiento tiene un programa de embellecimiento de la localidad. Por ello, Cultura nos confirmó que la cruz no estaba vinculada con la Ley de Memoria al haberse quitado la placa que había colocada en la fachada de la Iglesia, pero sí que entorpecía la visión de un monumento histórico catalogado como BIC (Bien de Interés Cultural). Por tanto, nos aconsejaron que no se sustituyera por ningún otro elemento”, ha indicado Flores.
En su intervención ante los medios, Carmen Flores ha afirmado que se han tenido encuentros con el párroco, “quién ha adoptado una postura sensata reconociendo que se trata de una cuestión que incumbe al Ayuntamiento. Además, incluso en algún momento pensamos en sustituirla por otra cruz para no herir el sentimiento religioso de algún sector de la población, pero como ya he dicho desde Cultura nos hicieron hincapié en que no se debería sustituir por nada”.
Flores ha afirmado que “este Equipo de Gobierno es memorialista y reconoce que esa cruz tiene unas connotaciones históricas que se pueden conocer leyendo historia y siendo objetivos. No debemos de quedarnos sólo en las opiniones de las redes sociales, porque no todo es cierto. Si la retirada de la Cruz hubiera sido sólo por cuestiones memorialistas tendríamos que haberlo llevado a pleno, como sucederá por ejemplo con la retirada de honores y distinciones al caudillo”.
Además, la alcaldesa de Aguilar ha manifestado que “este Equipo de Gobierno nunca ha tenido un sentimiento antirreligioso ante nadie. Hemos colaborado con la Iglesia es todas sus actividades, Semana Santa y eventos de todo tipo. Se han pedido subvenciones, se han restaurado Templos,… Incluso hemos restaurado cruces como la de la Plaza del Carmen, o la del Llano de la Cruz. Actualmente, también se está intentando poner en valor la Cruz de los Espejitos en la calle San Cristóbal”.
SOBRE LAS DECLARACIONES DEL OBISPO DE CÓRDOBA
Tras las declaraciones vertidas por el Obispo de Córdoba, Monseñor Demetrio Fernández, la alcaldesa de la localidad ha argumentado que ve “intrusismo en el señor Obispo de Córdoba cuando viene a Aguilar con amenazas para interferir en la institución que represento, aprovechando un medio de comunicación como es la televisión pública andaluza. De esa forma perdió toda autoridad, porque no representa el sentir de todos los feligreses de este pueblo. Este señor nunca ha aparecido por aquí para interesarse por los problemas reales de las personas, contra los que nosotros sí nos hemos enfrentado. Se piensa dueño del voto de sus feligreses, lo que me parece un insulto a la democracia y a la propia inteligencia, aunque nada de esto me sorprende porque en el poder que él representa no existe dicha democracia”.
“Este hombre apela a los sentimientos para manipular la buena fe de las personas. Los feligreses que cumplen con las buenas acciones que les manda la Iglesia tienen como recompensa el Reino de los Cielos y los que no somos religiosos hacemos las buenas obras sin ningún premio a cambio. Nuestro deber es atender a los sentimientos de toda la población, no sólo a los de un sector. La cruz tiene connotaciones degradantes hacia las personas que perdieron su dignidad en una determinada época de la historia de España. Las heridas no se cierran de cualquier manera, se cierran con actuaciones”, ha expresado Flores.
Asimismo, Carmen Flores ha señalado que “representamos a la mayoría, que es la que nos ha votado. No vamos a coger el camino del enfrentamiento y la pelea, nos basaremos en la razón y caminaremos juntos con quien nos quiera apoyar. No voy a agachar la cabeza, tenemos derecho a decir en alto lo que pensamos. Cuando se concluya este expediente procederemos a hacer lo que tenemos que hacer. No sé la fecha exacta del derribo, pero sí que será inminente”.
EN CUANTO A LAS MANIFESTACIONES A FAVOR DE MANTENER LA CRUZ
Con respecto a las manifestaciones a favor de mantener la Cruz, Flores ha indicado que “si alguien se quiere manifestar tiene derecho a hacerlo, puesto que son respetables todas las opiniones. Las personas que tengan sentimientos religiosos que piensen si es justo que haya personas que todavía sufran cuando pasan por esa cruz. El verdadero creyente tiene el sentimiento dentro del corazón, no hacia el exterior y, por ello, no necesita cruces a las que dirigirse. Como dice la cita bíblica ‘por sus hechos los conocerán, no por lo que digan’, y ya nos iremos conociendo todos”.
“Quién tiene una idea no quiere que nadie le de argumentos para convencerlo de lo contrario de lo que piensa. Yo no tengo Facebook, no me gusta juzgar a las personas de antemano, por lo que prefiero sentarme frente a frente con ellas y que me cuenten lo que les pasa y yo poder replicarle, lo demás no me interesa”, ha argumentado Flores.
Además, con respecto a la colocación del monumento a Rodrigo de Varo, Carmen Flores ha asegurado que “estamos pensando el lugar para su posible colocación y próximamente se informará”.
Para finalizar su comparecencia, la alcaldesa de Aguilar ha expresado que respeta “las opiniones de todo el mundo, hasta las que no comparto, pero que vengan aquí dos señores de VOX y que nos llamen “talibanes” a los que somos demócratas… Ellos representan a lo peor de este país y vienen aquí solamente a ponerse delante de una cruz, sin interesarse por nada más. Cada formación política puede tener su propia opinión y puede manifestarla si así lo ve oportuno, aunque aquí normalmente se juega a toro pasado”.
Esta misma tarde, y a través de un documento filtrado por redes sociales, se ha podido conocer que el Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera está tramitando el expediente de obra para llevar a cabo el derribo de la Cruz de las Descalzas.
Según este documento, próximamente se pondrá en marcha la obra “Demolición de la Cruz del Llanito de las Descalzas, en Aguilar de lo Frontero (Córdoba), en cuyo proceso trabaja el Servicio Municipal de Obras.
Una vez redactado el proyecto se ha decidido que la arquitecta técnica municipal de manera temporal, Ángeles Zurera, se encargue tanto de la dirección de la obra, como de la coordinación de Seguridad y Salud.
Cabe destacar, que el artículo 15 de la Ley de Memoria Histórica de 2017 es el que obliga a la retirada de los símbolos conmemorativos de la guerra civil, o de la dictadura franquista.
Hasta el momento, ni la alcaldesa, Carmen Flores, ni ningún otro miembro del Equipo de Gobierno han dado declaraciones sobre este asunto, que está dando lugar a multitud de opiniones en redes sociales.
Se da la circunstancia de que, durante el verano de 2018, asociaciones memorialistas y partidos políticos como Podemos, entre otros, reclamaron la retirada de la cruz, pues según aludieron se construyó para enaltecer los valores de la dictadura franquista, y fue lugar de represión y humillación pública de personas durante esta época.
Recientemente el sindicato Confederación General de Trabajadores (CGT) también se mostró a favor del derribo de la cruz.
Por el contrario, partidos políticos como VOX siempre han defendido la Cruz de las Descalzas como un símbolo con connotaciones religiosas y no ideológicas. El parlamentario socialista Antonio Hurtado también aseguró en su momento que esta cruz ya no se relacionaba con la dictadura franquista, añadiendo que “era un sencillo símbolo religioso en la portada de una Iglesia. Una simple cruz desligada del franquismo”.
Asimismo, otras formaciones políticas como Progreso y Democracia de Aguilar (APD) destacó en su momento que “la cruz de las Descalzas forma parte de nuestro patrimonio y está integrada en la forma de vivir de nuestros vecinos”, mientras que el PP de Aguilar comenzó a recoger firmas de apoyo para que se mantuviera la cruz, junto a la fachada de la Iglesia de las Carmelitas Descalzas.
Con fecha 1 de abril del año 1938, la Corporación Municipal de Aguilar aprueba la instalación de una cruz destinada a perpetuar la memoria de los caídos del bando nacional durante la Guerra Civil. Además, junto a la cruz en la fachada de la Iglesia se colocó una lápida de mármol en el que podían leerse los nombres de los aguilarenses del bando golpista que habían luchado y caído durante este conflicto armado.
Con posterioridad, el Pleno del Ayuntamiento de la localidad aprobó sustituir dicha placa por otra en la que rezaba la inscripción “en memoria de los caídos en la Guerra Civil Española 1936-1939”. Más tarde, esta placa también fue retirada, aunque la cruz ha permanecido hasta nuestros días.
La Asociación Cultura y Progreso de Aguilar de la Frontera ha dado a conocer un nuevo proyecto relacionado con las actividades memorialistas que viene realizando esta entidad durante los últimos años.
Al acto de presentación del citado proyecto han acudido la presidenta de Cultura y Progreso, Teresa Postigo, el coordinador del trabajo, Diego Igeño y José Galisteo, uno de los coautores de la obra, junto a Fran Zurera.
La idea ha sido diseñar una ruta que favorecerá la comprensión de un periodo histórico muy concreto, comprendido entre 1931 y 1945. Durante esos años tuvo lugar el desarrollo de la Guerra Civil y el comienzo de la Dictadura Franquista.
Según ha señalado Igeño, “la ruta ha sido elaborada para dar a conocer tanto los lugares, como los personajes y acontecimientos que tuvieron protagonismo durante ese periodo”. Para ello se han determinado 16 puntos ubicados en el término municipal de Aguilar, que permitirán a quiénes participen en esta actividad sumergirse en esta coyuntura histórica y espacial.
Las rutas serán guiadas y comenzarán el próximo fin de semana. El horario de inicio será las doce de la mañana, tanto el sábado 19 de diciembre, como el domingo 20.
El trayecto de la ruta será al completo por el callejero de Aguilar, por lo que la actividad está abierta a todas las edades. La inscripción será totalmente gratuita y deberá realizarse a través del correo electrónico Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., antes del próximo jueves, 17 de diciembre. Desde la asociación Cultura y Progreso responderán todas las solicitudes que les lleguen.
El coordinador del proyecto también ha comentado que “la ruta tiene dos objetivos fundamentales. Por un lado, la voluntad de permanencia, con la idea de que la ruta se mantenga a lo largo del tiempo y, por otro, esta iniciativa aspira a ser una herramienta aprovechable para los centros educativos de la localidad, por lo que se les ofrecerá como actividad formativa”.
Además, se va a preparar una guía que se entregará a cada participante de la actividad. En este dossier aparecerán los conocimientos que se expondrán durante la ruta y que formarán parte de la bibliografía del municipio.
El proyecto está patrocinado por la Delegación de Memoria Democrática de la Diputación de Córdoba.
Foto: Francisco Toscano
Operarios del Servicio de Obras del Ayuntamiento de Aguilar han procedido a lo largo de la mañana de este jueves a retirar la placa de cemento que indicaba la construcción de “los pisos de la Bética” o “pisos chicos”, primera fase de viviendas de la Barriada del Carmen.
En dicho elemento conmemorativo, que se situaba en el primer bloque de la barriada, existía simbología de la dictadura franquista, ya que estas viviendas se levantaron durante el citado periodo histórico.
Con esta medida el Ayuntamiento ha cumplido con la Ley de Memoria Histórica, que obliga a retirar de los espacios públicos aquellos elementos que supongan el enaltecimiento de la ideología sobre la que se sustentó la dictadura de Francisco Franco.
Esta iniciativa había sido valorada previamente en el Consejo Sectorial de Memoria Histórica del Ayuntamiento de Aguilar, órgano consultivo en el que participan distintas asociaciones y colectivos, junto a los grupos municipales, y en el que se estudian las iniciativas que se toman en esta materia a nivel municipal.
Según ha podido saber Madinfor Televisión, de momento se está estudiando cómo eliminar otro tipo de símbolos instaurados durante la dictadura franquista, tales como el nombre de algunas calles.
El Senador del Grupo Parlamentario de Izquierda Confederal, Carles Mulet, ha registrado una solicitud de informe para que se solicite al Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera documentación que avale las medidas que ha adoptado para, en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, retirar una cruz por los caídos, de origen franquista y ubicada en el exterior de la Iglesia de las Descalzas.
En dicha solicitud de informe, registrada este martes, Mulet pide que se solicite al Consistorio aguilarense "copia de las actas de acuerdos del Pleno u órganos de gobierno competentes, en los cuales se aprueba la retirada de la cruz de los caídos, para cumplir así con Ley 52/2007, de 26 de diciembre, por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas a favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil y la dictadura, al ser este monumento contrario a la legislación en cuanto elemento de exaltación franquista y lugar de represión y humillación pública de demócratas durante la dictadura”.
En este sentido, Mulet recuerda que "el Artículo 15 de esta Ley" expone, sobre símbolos y monumentos públicos "que las administraciones públicas, en el ejercicio de sus competencias, tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura”
En 2018 asociaciones memorialistas y partidos políticos como Podemos, entre otros, reclamaron la retirada de la citada cruz, argumentando que se construyó 'En memoria de los caídos por España' del bando franquista, y fue lugar de represión y humillación pública de personas durante la dictadura. Por otro lado, el Partido Popular de la localidad recogió firmas de apoyo para que se mantuviera la cruz de las Descalzas.
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